martes, 20 de julio de 2010

Los días grises.

Hoy está nublado. Me gustan mucho los días nublados. Seguro va a llover y me gusta cuando llueve, sobre todo cuando llueve y estas bajo alguna cobija, abrazando a quien más quieres abrazar en el mundo.

Me gustan los días grises. Uno piensa mejor en los días grises, piensa en la nostalgía y la nostalgía trae buenas cosas algunas veces, otras no tanto. Tal vez no se piense con mucha claridad mientras se esta nostálgico, pero se piensa con el corazón, y yo prefiero cuando todo es menos racional y mas emocional.

Me gusta tomar café, en los días grises se vuelve perfecto. Café calientito en una mañana gris despierta el alma.

Recientemente descubrí que me encanta andar en bici en los días grises, y que comienze a llover, y tener que regresar lloviendo. En mi cabeza, cuando he andado en bici mientras llueve, es como si viera mi vida a través de un cinematógrafo viejito, con las tomas brincando y las imágenes sepia. Me gusta esa sensación, cuando un instante borra todo lo que pasa alrededor y queda sólo ese momento feliz. Es como una felicidad chiquita pero indescriptible.

Me gusta hornear casi cualquier cosa, mientras implique cocinar. Cocinar me pone de buenas. Más si estoy cocinando para la cena.

Me gusta quedarme callada y dejar que el tiempo pase mientras te miro a los ojos. Tratar de decifrar qué estas pensando. Me gusta más que me lo digas, sobre todo, en días grises como hoy.

2 comentarios:

In phidelio dijo...

Los días grises tienen algi especial, coincido con ud.

Un abrazo, mi Mafer

Gobseck dijo...

mira que la paciencia de ver cuando te dignabas a escribir de nuevo por fin se va transformando en ansiedad para leer algo nuevo! ahora.. no lo dejes ;) esta padre, a mi tambien me gustan los días grises, sólo que en ocasiones me recuerdan que disfrutaba mucho fumar, tomar café y fumar... ahora sólo tomo café.

Saludos!