Ya bajé, regresé a mi lugar y vi con sorpresa que era una carta con sello dorado fundido. La abrí y mi sorpresa se duplicó al ver de quién se trataba. No lo podía creer, leanla y continúo con mi relato.
Para aquellos que no lo ubican, el Conejo Rey o Rey Conejo (Ni él sabe como prefiere que le digan, aunque se enoje), apareció por primera vez por el mes de enero. Se auto declaró Rey y dueño absoluto de Maferilandia y todo lo que derive de ahí, y no conforme con ello, me organizó mi fiesta de cumpleaños y les ordenó (haganme ustedes el mentado favor) a todos los contactos de mi facebook que asistieran. Aquí el comunicado que mandó aquella vez.
Se me hizo bien buen pedo, y va, respeté sus decisiones. Es más, hasta se hizo de algunos fans en el face. Pero hoy tristemente me doy cuenta con su carta, que no esta feliz, y eso me asusta de sobremanera, se escucha muy molesto y algo loco. Seguí entonces su primera indicación, y le dí su justo valor en mi blog (ya cambié el banner, ¿vieron?). Pero sobre su segunda indicación estaba bastante inquieta, así que me comuniqué con él. Ésta fue la conversación:
Mfr: Hola Sr. Rey! ¿Cómo te va? ¿Que tal tus vacaciones?
RC: Ni te trates de hacer la amistosita conmigo, que ni te sale bien. Y háblame de usted, que falta de respeto. Hay clases.
Mfr: Disculpe, Rey Conejo. El motivo de mi llamada, de hecho, es para mostrarle mi respeto pidiéndole disculpas, jamás quise ofenderlo.
RC: Pues lo hiciste. ¿Qué es eso de Lémur, niñita? No mames. Si éste es un reinado de conejos, con colita de algodón, ¿de dónde carajos sacaste al Lémur?
Mfr: ...pues no sé si se fijó que se equivocó en su carta, no es "El rincón del Lémur", es "En el extraño mundo del Lémur"...
RC: Me importa un soberano rábano, escuincla, sigue siendo algo de un Lémur.
Mfr: Sr. Rey Conejo, no hay necesidad de las palabras altisonantes. Todos aquí estamos chupando tranquilos. Pensé en el Lémur, porque me parezco a uno, tienen ojos muy grandes. Sólo eso. Además, ya cambié el nombre del blog a petición suya.
RC: Vaya... ya estamos progresando. Ahora, por mí puedes escribir lo que te venga en gana, e incluso, morir de influenza fulminante mañana mismo si quieres. Pero yo no voy a permitir que sigas alimentando el pánico de masas, asi que pones mis indicaciones en éste mismo instante, por favor. Como dijo Ebrad, EN MI REINO NO VOY A PERMITIR LA INFLUENZA!! JAMÁS!. Así que optaré por informar a mis súbditos. Ya tu, por mí, autoescúpete con saliva influenzada la cara.
Mfr: Sr. Rey Conejo, de verdad, entiendo su enojo, pero por favor, no me hable así, me duele oirlo decir esas cosas tan horribles....
RC: beep... beep... beep...
RC: Ni te trates de hacer la amistosita conmigo, que ni te sale bien. Y háblame de usted, que falta de respeto. Hay clases.
Mfr: Disculpe, Rey Conejo. El motivo de mi llamada, de hecho, es para mostrarle mi respeto pidiéndole disculpas, jamás quise ofenderlo.
RC: Pues lo hiciste. ¿Qué es eso de Lémur, niñita? No mames. Si éste es un reinado de conejos, con colita de algodón, ¿de dónde carajos sacaste al Lémur?
Mfr: ...pues no sé si se fijó que se equivocó en su carta, no es "El rincón del Lémur", es "En el extraño mundo del Lémur"...
RC: Me importa un soberano rábano, escuincla, sigue siendo algo de un Lémur.
Mfr: Sr. Rey Conejo, no hay necesidad de las palabras altisonantes. Todos aquí estamos chupando tranquilos. Pensé en el Lémur, porque me parezco a uno, tienen ojos muy grandes. Sólo eso. Además, ya cambié el nombre del blog a petición suya.
RC: Vaya... ya estamos progresando. Ahora, por mí puedes escribir lo que te venga en gana, e incluso, morir de influenza fulminante mañana mismo si quieres. Pero yo no voy a permitir que sigas alimentando el pánico de masas, asi que pones mis indicaciones en éste mismo instante, por favor. Como dijo Ebrad, EN MI REINO NO VOY A PERMITIR LA INFLUENZA!! JAMÁS!. Así que optaré por informar a mis súbditos. Ya tu, por mí, autoescúpete con saliva influenzada la cara.
Mfr: Sr. Rey Conejo, de verdad, entiendo su enojo, pero por favor, no me hable así, me duele oirlo decir esas cosas tan horribles....
RC: beep... beep... beep...
Hmmm... me colgó. No está enojado, lo que le sigue. Yo mientras tanto, y aunque se enoje más el Conejo Rey, no voy a negar mi otro post, esta cabrón esto del bicho, pero con sus debidas precauciones no creo que pase nada. Mientras, creo que al Rey ya lo perdimos (¿Se habrá vuelto loco en el Caribe o sólo estara hostíl?). Les dejo el comunicado del Conejo Rey, para que no me vaya a reclamar.